domingo, 20 de febrero de 2011

De pronto empiezo a pensar en él, la ventana con su nombre aparece y todo me comienza a dar vueltas, la cabeza es cómo un cilindro que no puedo detener.
Por que voy tan aprisa, por que si mi acuerdo conmigo misma era esperar a que suceda, parece que tengo ansias por hacer que suceda.
Y otra vez me siento estúpida e insegura ante una nueva respuesta.
Me da miedo el no, ¿a quién no?, y él no ha respondido...
Mi corazón late desesperado por que ya no entiendo que es lo que quiere.
Creo que ha hecho trampa y sigue buscando, él siempre está haciendo eso.
Debo dejar que sólo pase y todo es tan repentino que no quiere creer que tal vez no suceda.
Estoy harta, de mi y de mis esperanzas.
Ya no quiero estar buscando, quiero el él me encuentre.

Señor amor, si alguna vez tú pasas por donde yo estoy, hazme un favor: Toca mi puerta que esperándo estoy

sábado, 5 de febrero de 2011

"Convierte en polvo, mis miedos y sospechas"
Rarezas.

Será que me empiezo a despedir...
creo llegar a un estado de hartazgo y sobre todo de cansancio;
ya no puedo esperar más a que tu hables cuando no quieres ni si quiera mirarme.
Dime que tengo que hacer para merecer un mensaje tuyo respondiendo a mi confesión...
cómo hacer para que te apiades de mi ansia y desesperación
y al menos respondas: no, ó algo. Ojalá no fuera NO, pero sí lo fuera,
yo sé que al menos terminaría con ésta angustia, habría algo concreto que pisar:
mi decepción y la completa seguridad de derrota.
¿Es eso?
¿Acaso perdí ya éste juego cómo así le denominamos?
No, cómo así lo denominaste tú, mientras yo mentía, me mentía;
diciendo que todo lo soportaría, que no habría por ti un sentimiento de...

Sé que es el momento justo para decidir que ya no te buscaré,
lancé mis cartas lo más inteligente y honestamente posible,
pero ya no puedo esperar y mucho menos que tú me quieras también,
esperar que al menos seas valiente y me digas que pasa.
De cualquier forma me iré, será lo más sano, sobre todo para mí.
No sé si es correcto o lo más acertado, pero sólo sé,
que ya no quiero llorar más esperando ¿nada?
ni aferrarme a algo que tal vez nunca fue.
¿Acaso jamás sabré que sentías tú al estar conmigo?

jueves, 3 de febrero de 2011

Busco razones para contemplar mi suerte y no veo camino ni respuesta ante ésta.
Pretendo ser quién soy y dejar "el debo" a un lado y aún no sé realmente qué más puedo ser; quizá hay en mí razones para no descubrir lo del fondo: MIEDO.
Luego pienso en que no hay nada qué perder y me da miedo también: estar vacia, más miedo me da ésto que entregar y romperme la madre más de una vez.
Proyectos, papeles, luchas; yo sólo quiero ACTUAR.
Y es cómo sí no supiera que quiero pero luego pienso que realmente quiero sólo dos cosas: Teatro y a él.
Luego me brindo "Mucha miérda" para poder salir adelante y hay otros veinte obstáculos que me nublan el camino, todos empezando con la palabra MIEDO.

OGA

Me estoy volviendo loca pretendiendo que no te pienso, que no me he pasado los últimos días extrañando tremendamente tu sonrisa.
Quiero gritar tu nombre mil veces al viento, a cada rostro al que me encuentro día con día, como si con eso pudiera traerte frentea mí, cómo sí con eso pudiera besarte.
Quisera poder acariciarte el rostro, besar tus ojos y entregarme sin miedo al vacio.
Y me odio por no poder hablar claro frente a ti, por no poder confrontarte y decir... decir tantas cosas.
Me siento en algunas ocaciones como un ser estúpido que espera una oportunidad, que espera una solucion placentera y a veces pienso que la estúpidez, esa misma, me ha dejado volar y conocerte. ¿Pero que no acaso enamorarse es hacer cosas que parecen estúpidas pero que son más verdaderas que cualquier otra cosa?
No sé por que te busqué y por alguna razón también me llamaste... no quiero pensar en el futuro ni en lo que no ha ocurrido.
Sinceramente quiero pensar en tí, tanto en tí...
Quiero recordar tus besos que son cómo agua pura que me hacen vivir más, rayos partiéndome el cuerpo. Quiero pensar que, más bien ya no quiero pensar.
No quiero llorar, no olvidar, pero también comienza a doler y eso me asusta, he descubierto cuanto.
Cómo dice una canción:
TE QUIERO, TE QUIERO, TE QUIERO y no hago otra cosa que pensar en tí...

Insisto en que me gustaría ser valiente y decirlo de frente.
Verte mañana, si pudiera hacerlo, lo primero que haría es abrazarte por lo menos por una hora entera.
Luego besar tus labios anchos y dulces.
Platicar más horas y luego... y luego ¡que sea lo que sea! :D

¡¡Ah!! Extraño verte reÍr. Oirte hablar, mirarte mientras duermes, escuchar tu respiración y sentir tu mano estrechada con la mía.

sábado, 22 de enero de 2011

¿Porqué me es tan dificil simplemente decir que me gustaría verte más seguido?
Qué cada día que pasa, mi mente evita el tema de tu nombre queriendo aparecer por todos lados, por cada uno de mis poros, por cada una de las hojas de mi cuaderno.
Mi mano se ve tentada a escribir tu redondo y corto nombre.
Ya no puedo negarme que importante eres, que cada vez vienes a mi cabeza instantáneamente al oír mencionar a cualquier Cáncer...
Demonios, ¿què debo hacer si tú no sientes eso? ¿O si?
Maldita incertidumbre... probablemente si me atreviera a decirte todo esto la evitaría,
pero no puedo, me da miedo que te vayas, que te dé miedo que te quiera. Por qué es así,
te quiero y ya ocupas un lugarcito en mi corazón. (Lugarcito por que todo el tiempo detengo que el lugar se haga más grande, quizá es por miedo)
A veces pienso que fui valiente al empezar ésto, por que así pude conocerte más y no me arrepiento, no me arrepiento aunque ahora esté hecha un lío: contigo, conmigo misma, por evitar que esto que siento se note, te afecte, me afecte.
Y otras veces, pienso que soy cobarde por no terminar lo que talvez ya terminó desde hace mucho o lo que tal vez apenas está por comenzar.
Créeme, tal vez a ti te dé miedo querer, quererme a mí, no lo sé, pero creeme a mí cuando digo que también me da miedo querer, quererte a tí. Sin embargo quiero hacerlo, quiero arriesgarme por que sé que vale la pena intenarlo y quererte precisamente a tí por lo que eres, por quién eres y por lo que me haces sentir cuando estoy y hablo contigo.
Sólo pido que no temas, y que no dejes de verme, yo aún quiero verte.
Dame una oportunidad de entrar a tu vida simplemente queriéndote, pues estoy dispuesta a abrirme a ti, ¿no acaso ya lo he hecho? date la oportunidad de dejarme entrar y quereme también...
Quisiera que me llamaras, que tan sólo un mensaje tuyo llegara.
Quisera poder decir lo que siento sin miedo a perderte;
quisiera, besarte a diario y hacerte el amor también
y mientras lo hago entregarme sin detenerme.
Quisiera tomarte de la mano y contar las lineas una y otra vez.
Mirar tus bellos ojos y acariciar tu peculiar nariz.
Quisiera llamarte sin temor a cantarte, a acariciarte;
acariciar tu pelo y meterme entre las cobijas a tu lado.
Abrazarte mientras duermes, que me abraces mientras duermo
sentir tu aliento, recostados frente a frente, mirándonos
y despertar para besar tus labios otra vez, hasta saciarme la sed.

19/enero/11

domingo, 3 de octubre de 2010

Como sí sentirse solo no fuera suficiente,
además, tienes que caminar entre robots asesinos y fríos,
entre puestos de basura y amarillismo...
como si no fuera sufieciente sentirse sólo.

Entonces me queda claro que la única sensación que encuentro en mi
es la de un vacío tremendo entre el amor, el odio, la desesperación, la ausencia
y mil y un más emociones...

sin embargo aunque sé que cuento con todo esto, no puedo llenar ese enorme vacío
que pareciera nunca terminar, ¿y si no lo hace?, ¿y si no desaparece nunca?

Una mujer blanca con ojos grandes me está mirando, lleva una gran capucha blanca,
toda ella es fría, lo que mas percibo son sus ojos y sus labios rojos, ¿podrían ser morados?
casi, sí, casi lo son.
Me mira como si nunca hubiera visto una persona como yo, ¿cómo soy yo?; no lo sé,
o tal vez sí, pero realmente quizá no quiero saberlo, tampoco quiero afirmarlo,
simplemente quiero evadir, olvidar lo que creo entender soy
tampoco quiero llorar, ya no más,
entonces soy pequeña, aún pequeña, aun una nena
sí, puede ser
una nena que no quiere ver la realidad, ni abrir los ojos para darse cuenta de que finalmente
la soledad está ahí, siempre está.
Como si esa mujer fuera la misma persona de la que he estado huyendo,
de mi misma, de daniela itzel, ITZEL, jaimes... ¿padilla?, aún dudo de ese...
ella me aguarda con la imagen en la mano, una imagen blanca sin absolutamente nada que decir
y todo que escribir

quizá me hace falta no pretender escribir nada y tal vez simplemente comiencen a aparecer trazos verdaderos, reales y llenos de esperanza.

¿quién dijo que no creía en la esperanza?
¿el verde es mi color favorito o no?